Se puede ver mobiliario de Stua por todo el mundo: las oficinas del Guggenheim de Nueva York, el Museo de la Acrópolis de Atenas, el Chillida Leku y casas particulares en Europa y Estados Unidos. Además de haber conseguido el Premio Nacional de Diseño en 2008. Jon Gasca nos cuenta en esta entrevista, que te oferecemos en dos partes, a qué se debe ese éxito y cómo ve el presente y el futuro —eso sí, sostenible— de la empresa y del diseño.
Este diseñador donostiarra, que trabaja junto a su padre, Jesús Gasca, en STUA, ha hecho también incursiones en el mundo de la fotografía y de la pintura.
¿Cuál es el espíritu de Stua a día de hoy?
Desde su concepción STUA ha buscado crear muebles que perduran en el tiempo y en la memoria. Hoy día seguimos pensando de la misma manera, y con el tiempo hemos aprendido a hacer esos muebles cada vez más cercanos al público. En STUA pensamos que los muebles de diseño han tenido históricamente ciertos tópicos que no son ciertos. El diseño debe ser cómodo. El buen diseño puede ser asequible. Buscamos que el diseño de STUA haga de nuestra casa y entorno laboral un espacio mejor, que nos ayude a vivir de una manera más sencilla, que casi nos ayude a ser más felices.
¿Cómo ve el mundo del mobiliario actual? ¿Está más triste ahora que hay crisis?
Hoy día se puede observar una tendencia a buscar todo low-cost, pero ese tipo de muebles no respetan el medio ambiente, y requieren tener que reemplazarlos por otros en un breve plazo de tiempo. La imagen que se transmite con esto es la de precariedad. No creo que los muebles actuales sean más tristes, al menos en los muebles de diseño, no. Hay una tendencia a la integración de diferentes estilos, creando fuertes contrastes, que pueden ser muy enriquecedores.
Seguimos con el análisis actual. ¿Prima la imaginación, o la funcionalidad rabiosa y práctica?
La sociedad actual esta cada vez más atomizada, ahora podemos encontrar desde los pequeños productores, casi artesanos que crean sus piezas, hasta las grandes multinacionales. Afortunadamente gracias a Internet es fácil descubrir todo tipo de muebles y enamorarse de ellos. Desde STUA proponemos cuidar la funcionalidad: las sillas deben ser cómodas, pero no por ello deben ser aburridas.
¿Qué supone trabajar junto a su padre? No siempre es fácil tener una buena relación profesional con un padre…
Los años de trabajo conjunto han limado las aristas, y cada vez nos entendemos con mayor facilidad. Lo cierto es que al unirme a STUA me uní a un barco que estaba en marcha y que navegaba en la dirección adecuada. Yo me he limitado a alimentar el motor, lograr comunicar los valores de STUA, las ideas de Jesús Gasca a todo el mundo.
Dígame algo que haya aportado usted a la empresa que no se tuviera en cuenta antes…
Mi padre viene de la cultura del trabajo, pero no de la comunicación, esa nueva vertiente a la que me he dedicado. No basta con hacer bien las cosas, hay que mostrar esos logros.
¿Cómo consigue Stua estar ‘en todas partes’? Donde hay un buen proyecto de interiores siempre aparece Stua…
Nosotros no vendemos nuestros muebles, sino que lo que intentamos es hacerlos tan atractivos que la gente desee tenerlos. Digamos que más que vender nuestros muebles, la gente los compra. Hemos logrado crear entorno a nuestra marca sentimientos de cercanía, que ayudan a gente a acercarse a nosotros.
Fuente: www.hola.com
0 comentarios:
Publicar un comentario